A los varios días Shikaku logró entrar en modo sennin, ahora solo faltaba perfeccionarlo y para eso necesitaba tener en cuenta que el ninjutsu Katas de Sapos era muy muy importante.
Era un sábado a la mañana cuando Shikaku se despierta de su cama y va al despacho, ya no había tanto papeleo como cuando recién entraba a la torre del Hokage, así que el sigue intentando ponerse más fuerte de lo ya es.
Shikaku parte hacia la cascada de la "Zona Prohibida", para los chunnin y menores de rango, para ponerse a entrenar y perfeccionar el modo sennin. Empieza canalizando el chakra de la naturalez como debería hacer y tranquilo en unos minutos logró entrar a su modo ermitaño. Luego de esto veía que no sentía un potencial mucho mayor por estar en ese modo el necesitaba otra senación de poder, así que por esto el empezo a practicar el poderoso ninjutsus Katas de Sapos; este consistía en tener más poder y mayor defensa del que ya te daba el modo sennin.
Nara siguió practicando por horas intentando canalizar el chakra de la naturaleza, intentando hacerse cómo uno, como si fuera su chakra de siempre. Luego de tanto canalizar y tener varios periodos de problemas Shikaku logró perfeccionar y empezo a correr por todos lados conn el modo sennin y así empezo a romper rocas y en una de ellas golpea un paredón alto, la parte a la mitad de una simple golpe de puño y hizo una cascada. Shikaku satisfecho por el poder logrado se fue y pensó -Mañana volveremos para más poder y poder defender a toda la ciudad más facilmente-